La resiliencia es la capacidad de levantarse después de una situación traumática o una crisis aguda; es la capacidad de resistir y mantener el equilibrio mental y funcionar con normalidad mientras se están viviendo eventos críticos. Es decir, son capaces de resistir y de seguir adelante después de un trauma.
La palabra resiliencia significa precisamente algo así como “volver a la normalidad”, y es una palabra que viene de la ingeniería, en donde se aplica a un metal que después de sufrir una presión que lo deforma, vuelve a su estado inicial, recuperando la forma. Y aunque venida de la ingeniería, es una palabra más conocida hoy en día por la psicología y las ciencias sociales.
Ser resiliente significa no solamente levantarse después de un trauma, sino también de todo un período o una etapa de vida difícil. Por ejemplo, en el caso de niños que han vivido en las peores condiciones, como un medio ambiente de delincuencia, drogas, prostitución, etc. En esos casos se esperaría que esos niños van a ser delincuentes precoses, que jamás van a terminar sus estudios, y en fin, un futuro de lo peor. Pero las investigaciones han ido mostrando que pese a toda esa adversidad, muchos de esos niños se sobreponen a las condiciones negativas en que fueron criados, y logran ser personas normales, adaptadas a la sociedad, y capaces de trabajar y mantener una familia. O el caso de mujeres que han sufrido vejaciones, abusos y hasta violaciones, y que pese a todo esto pueden llevar una vida normal y disfrutar del sexo de manera sana.
Esta también es una de las razones por las cuales la psicología está tan interesada en la resiliencia. Y está buscando cuáles son las características que de las personas resilientes. Aunque no está del todo claro todavía, se ha ido esbozando un perfil de estas personas.
La primera característica que se ha descubierto es que estas personas ven la vida de una manera más optimista y entusiasta. Tienen esperanza, pensando que lo malo siempre va a pasar, y después viene lo positivo.
Estas personas tienen mayor curiosidad, están abiertas a nuevas experiencias. No se quedan en la seguridad de lo conocido, sino que se atreven a experimentar nuevas cosas. Otro rasgo es que experimentan altos niveles de emociones positivas, como alegría, amor, camaradería, etc. Se centran más en las emociones positivas que las negativas. Además, tienen seguridad en sí mismas y confianza en su propia capacidad de enfrentar lo que les suceda.
Poseen también metas claras, un proyecto de vida importante para ellos. No se trata de grandes metas, sino de objetivos concretos que para ellas tienen significado. Otro rasgo importante es que piensan que se puede aprender tanto de lo positivo como de lo negativo de la vida. Por lo tanto no esperan que siempre todo sea bueno, ni se quejan constantemente de lo malo. En este sentido utilizan las emociones positivas para combatir los eventos negativos. En otras palabras, son capaces de hacer frente a las experiencias traumáticas utilizando el humor, la creatividad y el pensamiento optimista. HBC
La palabra resiliencia significa precisamente algo así como “volver a la normalidad”, y es una palabra que viene de la ingeniería, en donde se aplica a un metal que después de sufrir una presión que lo deforma, vuelve a su estado inicial, recuperando la forma. Y aunque venida de la ingeniería, es una palabra más conocida hoy en día por la psicología y las ciencias sociales.
Ser resiliente significa no solamente levantarse después de un trauma, sino también de todo un período o una etapa de vida difícil. Por ejemplo, en el caso de niños que han vivido en las peores condiciones, como un medio ambiente de delincuencia, drogas, prostitución, etc. En esos casos se esperaría que esos niños van a ser delincuentes precoses, que jamás van a terminar sus estudios, y en fin, un futuro de lo peor. Pero las investigaciones han ido mostrando que pese a toda esa adversidad, muchos de esos niños se sobreponen a las condiciones negativas en que fueron criados, y logran ser personas normales, adaptadas a la sociedad, y capaces de trabajar y mantener una familia. O el caso de mujeres que han sufrido vejaciones, abusos y hasta violaciones, y que pese a todo esto pueden llevar una vida normal y disfrutar del sexo de manera sana.
Esta también es una de las razones por las cuales la psicología está tan interesada en la resiliencia. Y está buscando cuáles son las características que de las personas resilientes. Aunque no está del todo claro todavía, se ha ido esbozando un perfil de estas personas.
La primera característica que se ha descubierto es que estas personas ven la vida de una manera más optimista y entusiasta. Tienen esperanza, pensando que lo malo siempre va a pasar, y después viene lo positivo.
Estas personas tienen mayor curiosidad, están abiertas a nuevas experiencias. No se quedan en la seguridad de lo conocido, sino que se atreven a experimentar nuevas cosas. Otro rasgo es que experimentan altos niveles de emociones positivas, como alegría, amor, camaradería, etc. Se centran más en las emociones positivas que las negativas. Además, tienen seguridad en sí mismas y confianza en su propia capacidad de enfrentar lo que les suceda.
Poseen también metas claras, un proyecto de vida importante para ellos. No se trata de grandes metas, sino de objetivos concretos que para ellas tienen significado. Otro rasgo importante es que piensan que se puede aprender tanto de lo positivo como de lo negativo de la vida. Por lo tanto no esperan que siempre todo sea bueno, ni se quejan constantemente de lo malo. En este sentido utilizan las emociones positivas para combatir los eventos negativos. En otras palabras, son capaces de hacer frente a las experiencias traumáticas utilizando el humor, la creatividad y el pensamiento optimista. HBC
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